Para rezar la Coronilla de la Divina Misericordia necesitaras un Rosario.
Para comenzar, harás la señal de la Cruz y luego dirás un Padre Nuestro, un Ave María y el Credo de los Apóstoles.
En cada cuenta del rosario, donde comunmente se reza el Padre Nuestro, dirás las siguientes palabras:
Padre Eterno, Te ofrezco el Cuerpo y la Sangre, el Alma y la Divinidad de tu Amadísimo Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, como propiciación de nuestros pecados y los del mundo entero.
Después, en las cuentas del Ave María, dirás las siguientes palabras:
Por Su dolorosa Pasión, ten misericordia de nosotros y del mundo entero.
Al terminar las cinco decenas del rosario, dirás tres veces la doxología final:
Santo Dios, Santo Fuerte, Santo Inmortal, ten piedad de nosotros y del mundo entero.
Para finalizar la Coronilla, y de manera opcional, puedes hacer la siguiente oración:
Oh Dios Eterno, en quien la misericordia es infinita y el tesoro de compasión inagotable, vuelve a nosotros Tu mirada bondadosa y aumenta Tu misericordia en nosotros, para que en momentos difíciles no nos desesperemos ni nos desalentemos, sino que, con gran confianza, nos sometamos a Tu santa voluntad, que es el amor y la Misericordia Mismos. Amén.